Una nueva jornada con climatología favorable en la que pudimos disfrutar de una nieve en polvo en prácticamente la totalidad de la estación.
Como de costumbre tras el desayuno, viaje en autobús camino a la estación de esquí, con alguna que otra cabezadita en la casi media hora de trayecto.
A la llegada a la estación cambio de zapatillas por las botas de esquí y recogida de tablas y bastones para dirigirse con los correspondientes monitores.
La estación prácticamente vacía esperaba a nuestros aguerridos alumnos.
Mientras los alumnos se encuentran en las clases de esquí hay tiempo para que los profes visiten zonas de mayor dificultad y algunos fuera de pista.
Después de la comida, tiempo para esquiar en grupos de alumnos con los profesores practicando por las pistas en las que se había estado con los monitores y explorando otras nuevas para mejorar las habilidades.
Al finalizar la jornada, las nubes comienzan a asomar anunciando una posible nevada para la noche. De regreso al hotel tiempo para acicalarse y ponerse las mejores galas para acudir a la discoteca.